Su sola presencia es polarizante. Sus opiniones generan discusión. Su crítica ácida y estilo confrontativo generan controversia. Su estilo directo y tosco roza el insulto y sus juicios son tajantes y sin apelaciones. Estas letras son de aplicación dual en Costa Rica si se piensa en la periodista Pilar Cisneros y en el economista y político Ottón Solís.
por: Esteban Mata / 2 diciembre, 2020

Su sola presencia es polarizante. Sus opiniones generan discusión. Su crítica ácida y estilo confrontativo generan controversia. Su estilo directo y tosco roza el insulto y sus juicios son tajantes y sin apelaciones. Estas letras son de aplicación dual en Costa Rica si se piensa en la periodista Pilar Cisneros y en el economista y político Ottón Solís.
Mezcle sus discursos y píquelos bien, agregue dos vasos de agua neoliberal y cinco cucharadas crítica al Gobierno y tendrá un coctel explosivo, apetitiso para los medios de comunicación y curioso para una ciudadania canasada de los partidos políticos, crítica de los yerros del Gobierno y del cinismo de algunos actores de esta y la anterior administración.
Vierta eso en redes sociales en el perfil de un nuevo movimiento político (nque se dice no partidario) y tendrá atención mediática, como la que está leyendo. Por aquí camina el éxito de Demo Lab, una fundación que vino a mover los entretelones políticos esta semana.

En sus videos promocionales figuran actores políticos y económicos como el economista Gerardo Corrales, el experto en política pública Roberto Artavia, el exnegociador del Comex, al rectora de la Ulacit, Silvia Castro y el exnegociador del Comex Alberto Trejos, quienes señalan problemas estructurales y políticos del país, sin que necesariamente sean parte de la fundación.
Tanta atención han recibido, que esta misma tarde en su perfil de redes sociales corrieron a aclarar que no son una agrupación política, pese a que se sirvieron de actores políticos para llamar la atención.
“En los recientes días se ha levantado información falsa sobre nuestra organización. La figuras políticas que consultamos en nuestros vídeos son personas con canas a las que nosotros les solicitamos sus perspectivas para entender mejor los problemas nacionales del ayer, para poder descubrir el hoy y ojalá descifrar el mañana. A esas personas como a todas las que participan en nuestros contenidos les agradecemos compartir sus opiniones”, decía un comunicado.
Este mismo miércoles Cisneros y el fundador de Demo Lab, Álvaro Castro, defendían su movimiento en el programa radial La Lupa, con el periodista Carlos Villalobos.
Castro, quien se presenta como investigador social asegura que busca abrir un espacio “sin fines de lucro, que no representa un partido político” y que escucha a todas las voces, para fundar el movimiento.

“Nosotros somos una organización creada por ciudadanos y para ciudadanos. Trabajamos en proyectos que van desde la ciencia, el arte, las políticas públicas y el involucramiento de los ticos. Constantemente estamos consultando voces, generando diálogo y también cuestionando. En nuestro video de lanzamiento de la campaña Hagamos Algo; personas con pensamiento tan diferente…que coinciden en los mismos puntos, y viendo la situación con la misma óptica es un mensaje verdaderamente poderoso. Es una señal de que estamos madurando como sociedad en el diálogo tan necesario para poder ejecutar”, apuntó en el comunicado Demo Lab.
“Es es el eje de todo este asunto. En general, la sociedad costarricense es respectivamente tranquila y pasiva (…) Yo soy periodista, creemos en la palabra y creemos en la comunicación, no creo en la violencia”, dijo Cisneros, quien asegura que tanto ella como Solís, hablan de forma crítica contra el Gobierno, y pretenden vigilar el accionar de los políticos y del Gobierno.