Líder de la Alianza Evangélica: «Ellos no son ni representan la iglesia Evangélica. No son un bloque. Nueva República no ha ganado un diputado en el Congreso. Esa es una de las cosas que no podemos aceptar. Nueva República no ha ganado nada. Nueva República no puso un solo diputado en la Asamblea Legislativa».
«Ellos no son ni representan la iglesia Evangélica. No son un bloque. Nueva República no ha ganado un diputado en el Congreso. Esa es una de las cosas que no podemos aceptar. Nueva República no ha ganado nada. Nueva República no puso un solo diputado en la Asamblea Legislativa».
Con estas palabras, Rigoberto Vega, Presidente de la Federación Alianza Evangélica Costarricense (FAEC) inició una entrevista con PulsoCR en donde criticó fuertemente al excandidato presidencial Fabricio Alvarado y el bloque de diputados autodenominado Nueva República, quienes han tenido una severa posición en contra de los diálogos multisectoriales convocados por el Poder Ejecutivo.
Según el religioso, en un momento tan trascendental «todos deberían estar apuntando a una dirección y no es de recibo que haya movimientos político-electorales como el de Fabricio Alvarado o Sociales como el de Célimo Guido.
Vega criticó que estos planteamientos se sirvan para andar «maltratando e incendiando policías, agarrando a leñazos, tirando pedradas», además que es irresponsable «seguirle echando leña al fuego».
«No es de recibo que ningún movimiento político o social no se pliegue al llamado de diálogo. Hay que parar esto que no favorece a nadie».
Vega fustigó además contra el bloque tránsfuga y aseguró que, aunque los medios de comunicación empoderen el discurso que existen diputados de «Nueva República» no es así «nadie votó por ese partido en las elecciones» y dicha agrupación nació de una «división lamentable».
«Pero hay que dejar claro que la Federación no participará en ningún proceso electoral. La Federación no tiene partido político. Ningún partido político es la voz de la iglesia ni representa a la Iglesia».
‘Él no representa nada’
A continuación, un extracto de la entrevista que dio el representante de la Federación a este medio:
Nueva República (sic) y Fabricio se ufanan de ser el Partido cristiano en la Asamblea Legislativa. ¿Cuál es la posición de la FAEC? ¿Cómo ven que no participen en el diálogo?
No no. Él no es representante de la Iglesia Evangélica. Es más, él no representa nada. Será secretario general de no sé qué o de un partido que formó, pero no lo puedo aceptar. La única entidad con más de 70 años y con la representatividad a la Iglesia Evangélica en Costa Rica es la FAEC ¡Nada más!
No es una voz autorizada.
Un partido político y menos un candidato es la voz autorizada de la iglesia. Ellos no son pastores. Fabricio no es pastor. En el tema de representación, no lo es. La polarización y división que se da y lo que nos ha costado recuperar a nosotros por la mala óptica que ha habido (sic) y de quienes quieren empoderar su discurso es una gran preocupación para nosotros. Ellos no son ni representan a la Iglesia Cristiana Evangélica en Costa Rica.
¿Cuál será la posición de la Alianza Evangélica respecto al diálogo? ¿Participarán en el encuentro multisectorial?
Nos invitaron. La carta llegó ayer en la noche. Estamos valorando la respuesta que vamos a emitir y ver si se acepta la invitación. Estamos analizando.
¿Cómo ven ustedes desde la FAEC los llamados al diálogo del Gobierno y que el bloque fabricista no quiera participar? ¿Les duele que se autodenominen cristianos y tengan una posición «separatista»?
Nosotros vemos eso con preocupación. Como Alianza nos estamos uniendo a un llamado superior: El país. Veo que el Presidente del Congreso también. Es urgente que los sectores vayan al diálogo y acepten la invitación.
Pero ese no es el mensaje de Nueva República.
Es incomprensible para nosotros que en un momento tan dificil, estén queriendo mover las aguas para que continúe la descomposición social, bloqueos y se boicoteen procesos de diálogo transparente que se están queriendo ofrecer.
No vemos bien, llámese como se llame, que se continúe en estas actitudes que no ayudan a nada.
¿Usted cree que estas actitudes busquen réditos para las elecciones del 2022?
Si ese es el cálculo, creo que es el momento menos indicado para eso. Todos estamos esperando una actitud constructiva donde todos esperamos una voz que llame a la calma y unidad. El pueblo juzga a las voces disidentes. Los que no quieren contribuir en esto son los que nos tienen en esta crisis.